"Contribuir a que las personas recuerden que son seres perfectos y que son tremendamente amados es el motor de mi vida. "
Cuando alguien me elige para ayudarle a entender mejor lo que está pasando en su vida, lo que hacemos es caminar de la mano hasta comprender toda la situación a la Luz de la Verdad.
Presenciar el inmenso amor, liberación y serena alegría que ese proceso le genera hace que me sienta tremendamente bendecida.
ARANTXA LIMÓN
Mi historia
Desde la perspectiva que me da la adulta que soy ahora, creo tengo registro de experiencias espirituales desde pequeñita.
Recuerdo acurrucarme en uno de los balcones de la casa familiar y pasarme las horas mirando al cielo desde ese rincón. Era una sensación que me apaciguaba.
Pasaron los años y tuve algunos escarceos autodidactas de la mano de libros de línea New Age que irrumpieron con fuerza en aquella época como “Las nueve revelaciones”, “El Alquimista” o “Dios vuelve en una Harley”, entre otros.
Pero mi revolución interior y el despertar de la conciencia tuvo lugar definitivamente durante mi año de Erasmus en Berlín. Allí se abriría un camino ante mí que, como ya supe entonces, no podría abandonar ya.
Unos años después murió mi padre. Y me enfadé tanto con Dios que cerré la válvula que me mantenía conectada con toda la esfera espiritual. Y dejé de drenar amor y se me encharcó el alma en la tristeza.
Y para cuando vi que sola no sabía salir de esa situación, me mandó ese Dios del que había renegado una señal inequívoca que me lanzó de cabeza al que fue mi primer curso de Registros Akáshicos. Era el año 2007, el curso tuvo lugar en el Monasterio de Montserrat y la persona que me trajo de vuelta fue mi Maestra Laura Lagos.
Cinco años después de ese primer curso, en 2012, la escuela en la que me formé y a la que aún pertenezco, ARCI, me nombró Maestra en Registros Akáshicos.


Mi aportación
Como Maestra de Registros Akáshicos he realizado centenares de lecturas y numerosas formaciones por toda España (Cambrils, Mataró, Barcelona, Madrid, Bilbao, Huesca, entre otros).
Y como ser humano que sigue evolucionando, he buscado maneras nuevas de responder a las mismas preguntas sólo que encontrando otros lugares desde los que observar la misma Verdad. De este modo, me inicié hace más de seis años en la Astrología Psicológica en Cosmograma, Escuela de Astrología en la que aprendí el lenguaje arquetipal que nos permite explicar cómo se articula nuestra mente y nuestra identidad.
La formación en Astrología, así como todas las consultas de Carta Astral que llevo realizando me confirman una y otra vez la innegable singularidad de cada ser humano. Y eso me fascina.
Complementando mi proceso de crecimiento como terapeuta he seguido a lo largo de los últimos cinco años la formación en Constelaciones Cuánticas, de la mano de Brigitte Champetier de Ribes. El enfoque sistémico me ha permitido incorporar una mirada más amplia y me da un margen de maniobra más efectivo.
Me defino como
Facilitadora de Registros Akáshicos
Consultora en Astrología Psicológica
Habilitadora de un diálogo armónico entre Cuerpo, Mente y Alma